Realizar al coche una revisión al año, como mandan los cánones, evitará tener que hacer mayores desembolsos en el futuro como consecuencia del desgaste de piezas. Además, conviene no olvidar que mantener el automóvil en buen estado es un seguro de vida, ya que hay acidentes que pueden producirse por un incorrecto funcionamiento.
Cuanto más se espacien las revisiones, peor será el estado del vehículo y habrá que cambiar y verificar más cosas
Pero, a pesar de sus bondades, hacer un "chequeo" al automóvil puede salir muy caro y, en tiempos de crisis, puede descuadrar el presupuesto familiar. Por ello, a continuación, se indican una serie de consejos para lograr que los necesarios mantenimiento y revisión del turismo sean lo más baratos posibles:
Realizar un mantenimiento preventivo
No hay que esperar a que el coche haga ruidos extraños, eche humo o vibre más que una atracción de feria para cuidarlo. Pero esta es una de las tareas más olvidadas por los conductores, que para mantener su automóvil se limitan a llenar el depósito y lavarlo a fondo una vez al mes. En realidad, si se revisan y cambian de forma rutinaria piezas y líquidos del vehículo, se puede ahorrar dinero a largo plazo.
Así, hay ciertos elementos del turismo que deben ser controlados por sus propietarios de manera regular:
Mantener limpio el motor
El motor del coche es esencial. Si está limpio, se reduce la frecuencia de las reparaciones, además de alargar la vida del vehículo. La suciedad en el motor puede tener peligrosas consecuencias: en forma de polvo, puede perjudicar al mantenimiento de una temperatura óptima, ya que puede elevarla y provocar recalentamiento, tanto en el interior como en el exterior.
Pero el automóvil no solo hay que limpiarlo por dentro. En este caso, la belleza exterior también es importante: una carrocería limpia dura más, y si se encera cada cierto tiempo, se protege de la corrosión. Cuanto más cuidado está, más dura y menos averías tiene.
Llevarlo al taller si es preciso, aunque no sea al oficial
Aunque pueda parecer lo contrario, cuanto más se espacien las revisiones, el estado del coche será peor y habrá que cambiar y comprobar más cosas, lo que equivale a tener que gastar más dinero.
Se puede buscar la opción que más se ajuste a cada bolsillo y, según el Reglamento 1400/2002, se pueden realizar las revisiones de mantenimiento en cualquier taller independiente. Hay que desterrar la vieja e interiorizada creencia de que por ello se pierde la garantía del fabricante, ya que no sucede así.
No hace falta indagar mucho para darse cuenta de que las casas oficiales son más caras, pero no siempre por el hecho de ser "oficiales" brindan una mayor calidad de servicio. Se puede encontrar el mismo servicio en otros talleres, a un precio mucho menor.
Hacer uno mismo las revisiones sencillas
Las revisiones básicas, sin arreglo de averías, cuestan una media de 200 euros y consisten en:
Cambiar el aceite y su filtro
El aceite y el filtro tienen una vida limitada y, por término medio, hay que cambiarlos a los 20.000 kilómetros o a los dos años. No es difícil hacerlo uno mismo, y en todos los manuales de los coches se indica con claridad cómo llevarlo a cabo.
Cambiar la batería
Al abrir el capó del coche, se ve de inmediato la batería. Comprobar cómo está es sencillo, y cambiarla, también. Puede hacerse con una simple llave inglesa y con cuidado.
Cambiar filtro del aire
Es lo más fácil. Basta con poner un filtro nuevo con ayuda de un destornillador.
Si este trabajo lo ejecuta uno mismo, puede suponer un ahorro considerable. Además, existen talleres de alquiler, donde los "manitas" pueden realizar hasta reparaciones más complicadas, sin tener que pagar la mano de obra.
Pero conviene aclarar que no se debe hacer una autorreparación para problemas serios o si se desconoce cómo llevarlo a cabo, ya que cualquier error puede ocasionar un accidente de la manera más insospechada. Pueden provocarse averías irreparables o mucho más caras de reparar que la inicial.
No comprar aceite, piezas, etc. de la marca oficial
En la misma línea de lo ya citado respecto a las "casas oficiales", con las piezas sucede lo mismo. Las que no son de la marca no son de peor calidad. En cambio, sí resultan mucho más económicas.
Se pueden utilizar recambios (aceite, filtros, etc.) de cualquier marca, aunque es importante que cumplan las exigencias mínimas del fabricante.
Estar atentos a las ofertas de talleres
Con la crisis, algunos talleres brindan un "dos por uno" en neumáticos o regalan algún servicio o limpieza si se hace la revisión con ellos, etc. Así que, buscar, buscar y buscar, y comparar siempre, es un buen modo de ahorrar dinero al revisar el coche.